Si quisiéramos recuperar la pureza en nuestras relaciones, ¿no nos fijaríamos en un niño? Ellos traban amistades sin prejuicio. No se fijan en el país de origen de los otros niños, ni en su diferente acento o costumbres. Ven más allá de las fronteras. Pero para que al ser adultos continúen llevando esa visión al resto del mundo es necesario que desde pequeños se les eduque en un entorno que prevenga el odio, la xenofobia y la violencia. Hoy, 9 de septiembre, que se celebra el Día Internacional para proteger la Educación de Ataques (gracias un decreto oficial establecido por la ONU el año pasado), recordamos que ese es el fin de nuestro proyecto ‘Junt@s somos más’.

A través de él, durante todo este 2021, queremos fomentar un clima integrador desde los colegios, algo que precisamente resultaría imposible sin garantizarles a los niños y jóvenes de todo el mundo un entorno seguro, que les permita relacionarse en la libertad y serenidad, y adquirir una formación integral.

Por eso afrontamos el comienzo del curso con nuevos talleres de sensibilización a través de los cuales se muestra la riqueza de la interculturalidad, que supone sumar desde lo mejor de cada persona y sus diferentes orígenes y vivencias.

Nada como el ejemplo de ellos. Como la amistad entre Álex y Yéscar, que nos cuentan en este video: